El segundo acto tiene lugar tres años después. En el primer cuadro vemos a un coro de lavanderas que debaten el caso de Yerma mientras lavan la ropa. Por ellas nos enteramos, por ejemplo, de que dos hermanas solteras de Juan se han mudado a la casa de la pareja para vigilar a Yerma. Este primer cuadro se abre y se cierra con una canción en la que, a través de varias metáforas e imágenes líricas, se habla sobre el sexo y la concepción de los niños.